Ellas.

Ellas son las madres de nuestras madres aunque se pueden considerar nuestras madres. Nos cuidan, nos miman, nos quieren.

Todos por suerte o desgracia gozamos de una, ya sea arriba o abajo. Gran parte la conocemos, aunque siempre guardan secretos. Mucha gente desea el poder a adentrarse en cada una de aquellas posibles historias.

No es mi caso y me siento afortunada por ello. Ella a parte de guapa crea su estilo propio, diseña aquella ropa que nadie se pondría, añade complementos a su gusto, y sobre todo no deja que ningún comentario negativo afecte a ese alegre y sabio carácter. Claramente carece de defectos pero no me importan, en cambio todas aquellas virtudes me compensan. No tan solo cura mis heridas, a su alrededor disfruta de 3 maravillosas y minúsculas personas más, ella ha compartido su vida con un genial hombre y a lo largo con dos mujeres esplendidas. En la vida descubriré muchas personas con carácter y personalidad diferente pero como ella no encontrare a nadie. Ella ha estado a mi lado cada vez que la he necesitado, me ha apoyado, me ha consolado, pero lo más importante, me ha aconsejado. Sus historias son inmensas, sus anécdotas me encantan, prodiga de una sabiduría incontrolable. Su vida no ha sido fácil, hay que reconocerlo pero creo que de familia nunca le ha faltado ni le faltara, y menos viviendo yo en este planeta. Hoy es un día muy especial para ella y sé que no es el regalo más maravillo, pero es uno de los regalos que se guarda, que se recuerda, aquellos que a lo largo del tiempo se mencionan. Sé que habitualmente no le digo todas aquellas virtudes pero hoy es el día. Ella es guapa, inteligente, independiente, cariñosa, es ella, es mi abuela. Espero que lo sepa y si no se lo recuerdo, te quiero y siempre te queré.